El cortometraje “El orden de las cosas”,nominado a los Premios Goya

‘El Orden de las Cosas’

Un corto nominado a los Goya aborda la violencia de género “desde la poesía y el surrealismo”
 
 
Los realizadores, han  recurrido  a la poesía y el surrealismo a través de una historia en la que Julia, su protagonista, que se da cuenta por ella misma de la vida que podría llevar en compañía de Marcos, un marido maltratador.




Durante los 20 minutos de duración de “El orden de las cosas”, los espectadores y espectadoras se encuentran con un recorrido a través de una serie de metáforas visuales que dejan ver el sufrimiento y consecuencias ocasionadas por un maltrato que nunca se muestra explícitamente.

En ningún momento de la película se deja ver un golpe, ni se escucha un grito ni un insulto, a pesar de que en el cuerpo de la protagonista van apareciendo “moratones”. Este tratamiento logra captar la atención de la gente, que no se despega de la pantalla hasta conocer el desenlace.



Una película cargada de símbolos, tanto en la ambientación como en las magistrales actuaciones. Julia soporta mientras Marcos no conoce otra manera de “querer” que la del único “orden de las cosas” que ha conocido en su vida.



Los hermanos Esteban Alenda indican que se trata de mostrar la cara humana de los maltratadores y las maltratadas. “Hacemos ver que el mismo maltratador sufre con el maltrato, pero nosotros no estamos tratando de justificar la violencia del hombre y que el hombre no es malo, no, simplemente la quiere mal, lo hace mal, no se debe querer así. Hemos tratado que el mensaje sea que al final ella se libera porque ella toma la decisión y solo por ella”, aseguran.



“Desde el primer minuto del corto, notas que se aparta del realismo, al final, es toda una representación poética de los estados de ánimo de los personajes”, dice José Esteban Alenda.



Para los cineastas “El orden de las cosas” no es una película de corte social. A pesar de toda la carga social que conlleva, usaron el tema de la violencia de género para contar la historia de una manera original. No se trata de “otro corto más sobre la violencia de género”, es un cortometraje que trata sobre la esperanza.



La falsa esperanza en que una vida trágica pueda cambiar sola, y la verdadera esperanza en que una decisión tomada a tiempo puede significar el comienzo de una nueva vida que seguramente sea mejor.




 
AmecoPress